Ay, Ale, cómo me salvo de la tristeza, cómo emerjo del fin de todo, qué hago con mis ilusiones de grandeza. Cómo hago para que este telón insoportable no caiga sobre mi enanez.
Mucho más que su visita, nos interesa su opinión. (Puede escribir también al final de cada capítulo) Hay 0 opiniones en esta entrada
0 Comments:
Post a Comment
<< Home